Colonoscopia

La colonoscopia es una prueba de detección de cambios o anomalías en el intestino grueso y el recto.

Este tipo de examen consiste en la inserción de un colonoscopio a través del recto. Se trata de un instrumento en forma de tubo largo y flexible, con una pequeña cámara de video en la punta del tubo que permite al especialista ver el interior de todo el colon.

Esta prueba se recomienda, principalmente, con el fin de conocer las causas de síntomas y signos como:

• Dolor abdominal.
• Sangrado rectal.
• Estreñimiento crónico.
• Diarrea crónica.
• Detección del cáncer de colon.
• Buscar reaparición de pólipos.

Se trata de una prueba prácticamente indolora y cuya duración es de aproximadamente 30 a 60 minutos.

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La colonoscopia es una prueba médica que consiste en la exploración del revestimiento del colon y la parte final del intestino delgado.

Así mismo, a través del colonoscopio es posible pasar una amplia variedad de instrumental, lo cual permite además de la exploración del tubo digestivo, la realización de cierto tipo de tratamientos como: extirpación de tejido anómalo o, la toma de muestras de tejido (biopsia).

¿Cuándo está indicada?

Este tipo de examen se realiza en aquellos casos que presentan una serie de síntomas que puede indicar el desarrollo de una patología o afección del tracto digestivo bajo, siendo los más comunes:

• Existencia de pólipos vistos previamente en una prueba radiográfica o una sigmoidoscopia.
• Desarrollo de anemia, siempre y cuando no se ha encontrado ninguna otra causa que pueda producirla.
• Dolor abdominal.
• Enfermedad intestinal inflamatoria.
• Alteraciones en las deposiciones: estreñimiento crónico o diarrea crónica.
• Sangrado rectal o sangre en las heces; heces negras o alquitranosas.
• Pérdida anormal de peso.
• Seguimiento de una enfermedad o afección diagnosticada previamente, como cáncer de colon, colitis ulcerosa o enfermedad de Crohn. 

Riesgos de la Colonoscopia

A pesar de que las complicaciones durante o tras una colonoscopia ocurren muy rara vez y, son solucionados exitosamente bajo los cuidados y vigilancia de un especialista, existe el riesgo de:

• Sangrado profuso o continuo a raíz de la biopsia o la extirpación de los pólipos.
• Agujero o ruptura en la pared del colon que requiere una cirugía para repararlo.
• Infección que requiere terapia antibiótica (poco frecuente).
• Reacción al medicamento para relajarse, que causa problemas respiratorios o presión arterial baja.

La Colonoscopia, con Operarme requiere de una serie de fases necesarias para llevar a cabo la intervención con la máxima seguridad. Para ello debes realizar los siguientes pasos:

1. Solicita la consulta inmediata con nuestro especialista en Aparato Digestivo, pudiendo hacerlo a través de nuestro formulario de contacto, llamando al 91 141 33 56 o clicando en cualquiera de los botones de Comprar Servicio de la web.
2. Nuestro equipo de atención al paciente te llamará para confirmar que la fecha y hora de la consulta se adaptan correctamente a tus necesidades.
3. Tras ello, deberás acudir a la consulta el día acordado.

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En la consulta de valoración, el especialista te preguntará sobre los síntomas que percibes y tu historial clínico, explicándote los beneficios que proporciona la prueba en caso de ser necesaria.

Tras la consulta, te prepararán para continuar con el proceso y someterte a la colonoscopia. A continuación, te explicamos todos los pasos que deberás seguir los días previos a la consulta y los mismos que te recordará nuestro equipo de atención al cliente antes de fijar la fecha de la colonoscopia.

Antes de someterte a la prueba es muy importante seguir las indicaciones y pautas previas a la intervención, siendo imprescindible limpiar (vaciar) el colon. Ello se debe a que cualquier residuo que se halle en el colon  puede dificultar la visualización del órgano y del recto durante la prueba. El especialista puede pedirte lo siguiente:

• Seguir una dieta especial los días previos a la prueba:
  • No consumir alimentos sólidos de 1 a 3 días antes.
  • Beber líquidos blancos: agua, té o café sin leche ni crema, caldos sin grasa, bebidas carbonatadas.
  • Zumos de fruta colados, como manzana o uva.
• Uso de enemas.
• Toma de laxantes.
• Ajustes en los medicamentos. Recuérdale a tu médico los medicamentos que tomas al menos una semana antes del examen, en especial si tienes diabetes, presión arterial alta o problemas cardíacos, o si tomas medicamentos o suplementos que contienen hierro.

Llegado el día de la prueba digestiva y ya en el hospital con el especialista, este te explicará de nuevo cómo procederá la prueba y te indicará que te prepares para entrar en la sala quirúrgica y dar comienzo a la colonoscopia. Este procedimiento constará de los siguientes pasos:

1. En primer lugar, tras colocarte sobre la camilla, generalmente sobre el costado izquierdo y las rodillas flexionadas hacia el pecho, procederán a administrarte la sedación y los analgésicos.
2. A continuación, en cuento haga efecto la anestesia, el doctor procederá a introducir el colonoscopio a través del ano y a desplazarlo lentamente a través del intestino grueso hasta alcanzar el comienzo del intestino delgado.
3. Durante el proceso se introduce aire a través para inflar el conducto, lo que permite una mejor visión del revestimiento. Es posible que el gas provoque que sientas calambres abdominales u otras molestias durante el proceso.
4. Una vez que el colonoscopio alcanza la apertura hacia el intestino delgado, el especialista comienza retirarlo lentamente y examina el revestimiento del intestino grueso otra vez.

La duración del procedimiento dura aproximadamente de 30 a 60 minutos. Finalizada la prueba, deberás permanecer en el centro hasta eliminar los efectos de la anestesia. Al tratarse de un proceso ambulatorio no será necesario el ingreso hospitalario.

El resultado se sabe de manera inmediata, una vez terminada la prueba. Sin embargo, cuando se han tomado muestras que hay que realizar el análisis en el laboratorio. En ese caso deberás  esperar unos días hasta tener un diagnóstico sobre la muestra tomada.

El precio de la Colonoscopia a través de Operarme es de 590 €, precio cerrado en el que se incluye todo lo relacionado con recursos humanos y técnicos necesarios para realizar la prueba. Estos recursos son:

• Reserva y uso de quirófano.
• Analítica de coagulación según indicación médica.
• Honorarios médicos y ayudantes hasta el alta médica.
• Anestesia y relajantes.
• Material quirúrgico necesario para la intervención.

En el caso de que durante la exploración del tubo digestivo se realice la toma de muestras de tejido, la anatomía patológica NO se encuentra incluida en el precio cerrado (expuesto más arriba). Contacta con nuestro departamento de atención al paciente para más información y resolver cualquier duda que puedas tener sobre la prueba.

Si tienes claro que quieres conocer a nuestros Especialistas en Aparato Digestivo para realizarte la Colonoscopia, puedes solicitar la consulta de valoración a través del 91 141 33 56 , por el formulario de contacto  o clicando a continuación:

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