Rotura de ligamento externo de la rodilla, causas, síntomas y tratamientos

4.7 (94%) 839 votos
Rotura de ligamento externo de la rodilla, causas, síntomas y tratamientos
Publicado: 31 de julio, 2015
Actualizado: 13 de diciembre, 2023
Escrito por Equipo de redacción de Operarme.es
  • En la articulación de la rodilla hay cuatro ligamentos que son susceptibles de sufrir lesiones: los ligamentos cruzados anterior y posterior y los ligamentos laterales interno y externo.
  • La lesión del ligamento lateral externo (LLE) de la rodilla es una lesión de uno de los ligamentos que se encuentran en la parte externa de la rodilla. Puede tratarse de una ruptura parcial o completa.
  • La rotura del ligamento lateral externo debe tratarse adecuadamente para evitar que se produzcan problemas mayores, como artrosis temprana. El tratamiento más efectivo es la intervención quirúrgica.

Configuración de la articulación de la rodilla

La rodilla es una de las articulaciones que más se utilizan del cuerpo humano, siendo la que más sufre debido a que soporta la mayor parte del peso del cuerpo. Por ello, es muy susceptible de sufrir lesiones a lo largo de nuestra vida, ya sea debido a las actividades que realizamos cotidianamente o a la realización de deporte.

¿Necesitas una cirugía de ligamentos cruzados?

¿Necesitas una cirugía de ligamentos cruzados?

Pide cita gratuita y sin esperas con uno de nuestros especialistas

Solicitar cita

Por la importancia que tienen en nuestro cuerpo las rodillas, ya que son las encargadas de permitirnos caminar y realizar otras actividades, mantener su salud es importante. Es por ello por lo que los problemas que se producen en éstas hay que tratarlos y repararlos con la mayor brevedad posible para que no se produzcan complicaciones mayores.

Algunos de los problemas que pueden surgir en la rodilla, más allá de las fracturas de huesos y las lesiones de menisco, son las roturas o lesiones en los ligamentos.

Podemos distinguir 4 tipos de ligamentos en la articulación de la rodilla:

  • Ligamento cruzado anterior (LCA): Une la parte trasera del fémur con la parte delantera de la tibia y pasa por detrás de la rótula. La función de este ligamento es evitar que se realice un desplazamiento hacia delante de la tibia con respecto al fémur.
  • Ligamento cruzado posterior (LCP): Al contrario que el LCA, éste va desde la parte delantera del fémur hasta el cóndilo interno. Su función es evitar el desplazamiento hacia atrás de la tibia con respecto al fémur. Este ligamento une la tibia con el fémur.
  • Ligamento lateral interno (LLI): Conecta la tibia con el fémur. Lo encontramos en la parte interna de la rodilla, es decir, en la parte de la rodilla que está más próxima a la otra rodilla. Su función es mantener la estabilidad de la rodilla a nivel interno, haciendo que la rodilla no se doble hacia afuera.
  • Ligamento lateral externo (LLE): Se encuentra situado en la parte externa de la rodilla y conecta el fémur con la tibia por el lado externo de la rodilla. Su función es mantener la estabilidad de la parte externa de la rodilla, haciendo que ésta no se doble hacia afuera. Este ligamento es en el que nos centramos en este artículo.

Estos ligamentos, junto con los huesos (fémur, tibia y rótula) y los meniscos, forman la articulación de la rodilla.

Artroscopia de ligamentos cruzados

El ligamento lateral externo de la rodilla

Como ya hemos dicho, el ligamento lateral externo (o colateral externo) da estabilidad a la rodilla, impidiendo que ésta se mueva hacia los lados cuando la sometemos a algún esfuerzo.

Está situado en la parte inferior-externa del fémur y va desde ésta hasta la parte superior-externa de la tibia.

La lesión de este ligamento puede ser de tres formas distintas: desgarro parcial, desgarro total o un estiramiento excesivo del ligamento, sin que éste llegue a desgarrarse.

¿Por qué se produce la rotura del ligamento lateral externo?

El ligamento lateral externo suele lesionarse debido a una presión que se ejerce sobre la parte de fuera de la rodilla. Algunos ejemplos de lesiones del ligamento lateral externo pueden ser:

  • Cuando se recibe un fuerte golpe en la parte interior de la rodilla.
  • Cuando se recibe un golpe en la espinilla, mientras la rodilla se encuentra doblada.
  • Cuando se coloca el pie en el suelo para impulsarse (por ejemplo al esquiar o jugar al fútbol).

En general, la rotura se da cuando el cuerpo realiza un giro y el pie se mantiene fijo en el suelo, ya que se ejerce presión sobre la articulación.

Los ligamentos son elásticos, lo que permite que se estiren lo suficiente. Sin embargo, cuando éstos se estiran demasiado puede ocurrir su rotura, lo que se denomina esguince (que es la lesión de rodilla que ocurre con más frecuencia).

¿Necesitas una cirugía de ligamentos cruzados?

¿Necesitas una cirugía de ligamentos cruzados?

Pide cita gratuita y sin esperas con uno de nuestros especialistas

Solicitar cita

Tipos de lesiones del ligamento lateral externo

Podemos distinguir tres tipos de lesiones:

  1. Esguince: Consiste en la rotura de algunas fibras del ligamento, debido a que éste ha llegado a su límite de elasticidad. Cuando una persona se hace un esguince suele sentir bastante dolor en la zona de la rodilla, aunque el pronóstico del paciente es bueno, ya que con las medidas necesarias, ésta dejará de doler. Con respecto a la estabilidad de la rodilla, se mantendrá.
  2. Rotura parcial: Se produce cuando el ligamento se rompe parcialmente, debido a que ya ha sobrepasado su límite de elasticidad. Existe más dolor e inflamación, además de algo de inestabilidad de la articulación.
  3. Rotura total: Es la lesión más grave que se puede producir en el ligamento. Como el propio nombre indica, ésta se produce cuando el ligamento se termina rompiendo por completo, produciendo una gran inestabilidad a la articulación. En este caso, le es prácticamente imposible al paciente mantenerse en pie, debido al dolor que le supone.

Rotura de ligamentos cruzados

Síntomas de las lesiones del ligamento lateral externo

Cuando se produce una lesión en el ligamento lateral externo de la rodilla, el paciente suele presentar los siguientes síntomas:

  • Dolor en la parte exterior de la rodilla, que será más o menos intenso dependiendo del tipo de lesión (si es un esguince, una rotura parcial o total). Este dolor se produce cuando se realiza algún movimiento de rodilla o incluso cuando se apoya el pie en el suelo.
  • Inflamación de la zona, también dependiendo de la gravedad de la lesión y del tipo de daño que haya sufrido el ligamento.
  • Sangrado interior debido al desgarro, produciendo éste un hematoma.
  • Sensación de inestabilidad en la rodilla. En el caso de que la rotura sea parcial, apenas habrá sensación de inestabilidad, por el contrario, si existe una lesión importante, habrá bastante inestabilidad en la rodilla, provocando una dificultad al caminar.

Lo más recomendable en el caso de que un paciente sufra alguno de estos síntomas, es que se ponga en contacto con el especialista de inmediato para que éste le recomiende un tratamiento.

Cómo se diagnostican las lesiones del ligamento lateral externo

Por lo general, una lesión en el ligamento lateral externo se diagnostica mediante la exploración física de la zona por parte del especialista. Es común que se realice en ambas rodillas, lo que permitirá al especialista realizar comparaciones.

Durante la exploración, se comprobará la gravedad de la lesión atendiendo a la inflamación y el tiempo aproximado que ha tardado la zona en inflamarse. Esto podría orientar al especialista sobre cuál es la gravedad de la rotura.

El especialista también forzará la rodilla hacia el lado contrario, lo que provocará que, si la rotura es completa, el ligamento no se tense y la articulación se abra por ese lado. En el caso de que la rotura sea parcial, la tensión del ligamento dependerá de la cantidad de fibras afectadas.

Diagnóstico lesiones de ligamentos

Algunas de las pruebas que puede solicitar el médico para saber cuál es la gravedad de la lesión son:

  • Radiografía: En estos casos sirven al cirujano para poder ver qué zona ha sido dañada exactamente y para poder descartar otras fracturas asociadas a la lesión.
  • Resonancia magnética nuclear (RMN): Suele hacerse en casos en los que el especialista tiene dudas acerca de la misma. La resonancia magnética puede detectar las roturas que se han producido en el ligamento y saber cuál es su gravedad. También puede detectar otras lesiones asociadas a la rodilla.

A través de estas pruebas, el médico podrá localizar dónde se encuentra la lesión y saber cuál es la gravedad de ésta, además también puede saber si hay inestabilidad o no en la articulación.

Según el tipo de lesión, el especialista planteará al paciente un tratamiento individualizado que le permita tratar correctamente su lesión.

Tratamiento de la lesión del ligamento lateral externo de la rodilla

Cuando se produce una lesión en el ligamento lateral externo, el paciente debe tomar unas medidas iniciales para evitar que empeore la lesión:

  1. Aplicar frío en la articulación durante las primeras 72 horas. Lo recomendable es aplicar el hielo (nunca directamente sobre la piel) durante 20 minutos cada hora, aunque sin sobrepasar las 3 horas al día.
  2. Hacer reposo durante un periodo aproximado de 24-48 horas, lo que evitará que la lesión empeore.
  3.  Colocar un vendaje en la zona de la articulación lesionada, pero con cuidado de no apretarlo demasiado para no cortar la circulación de la sangre.
  4. Mantener la extremidad elevada durante los primeros días. Cuando el paciente esté tumbado, lo recomendable es colocar una almohada bajo la pierna lesionada, manteniendo ésta elevada unos 45º. Si el paciente se encuentra sentado, lo recomendable es que apoye la pierna sobre una silla.
  5. Indicación  de medicamentos antiinflamatorios.

Por otro lado, según el grado de la rotura del ligamento lateral externo, habrá que tomar unas medidas u otras para tratar la lesión.

  • Si la rotura del ligamento es parcial, en principio se puede contemplar la posibilidad de tratamiento conservador, manteniendo la rodilla inmovilizada con un vendaje o incluso con yeso durante unas semanas.
  • Cuando la lesión es crónica, es decir, cuando no se ha detectado en su momento y ha pasado ya mucho tiempo, se construirá un ligamento nuevo a partir de los tendones.
  • En el caso de que la rotura sea completa, hay que someter al paciente a una cirugía para reconstruir el ligamento.

¿Necesitas una cirugía de ligamentos cruzados?

¿Necesitas una cirugía de ligamentos cruzados?

Pide cita gratuita y sin esperas con uno de nuestros especialistas

Solicitar cita

Intervención quirúrgica para reparar el ligamento lateral externo (artroscopia)

La reparación del ligamento lateral externo roto por completo, se realiza mediante una artroscopia de rodilla, una intervención que permite al cirujano ver el interior de la articulación sin necesidad de “abrir” la rodilla del paciente.

Cirugía de ligamentos cruzados

El cirujano realizará la artroscopia siguiendo los siguientes pasos:

  1. En primer lugar el anestesista administrará la anestesia al paciente, que suele ser general o raquídea (de la parte inferior del cuerpo únicamente.)
  2. Desinfectará la zona con un líquido antiséptico.
  3. Realizará tres pequeñas incisiones en la zona de la rodilla.
  4. Se introduce un líquido en el interior de la articulación, lo que hará que ésta se hinche y se limpie. Esto hará que el cirujano vea mejor la articulación y pueda intervenirla correctamente.
  5. El cirujano introducirá un artroscopio a través de una de las incisiones.
  6. Introducirá otras herramientas quirúrgicas por el resto incisiones realizadas y, con ayuda de éstas, extraerá el ligamento roto.
  7. Realizará unos túneles en el fémur y la tibia, por donde se injertará el nuevo ligamento.
  8. Se fijará el nuevo ligamento con tornillos quirúrgicos. Con el tiempo, el hueso crecerá y fijará el ligamento.
  9. Por último, se extrae el líquido introducido al principio y las herramientas quirúrgicas utilizadas en la intervención. Se pasará a suturar las incisiones realizadas.

La artroscopia reduce el dolor postoperatorio, al igual que los tiempos de recuperación.

Recuperación tras la intervención

Tras la intervención, es posible que el cirujano recomiende al paciente unas sesiones de rehabilitación, lo que le permitirá recuperar la movilidad de la rodilla, fortalecer la articulación, etc.

En cuanto a la recuperación tras la cirugía, es aproximadamente de 3 a 6 meses.

¿Necesitas una cirugía de ligamentos cruzados?

¿Necesitas una cirugía de ligamentos cruzados?

Pide cita gratuita y sin esperas con uno de nuestros especialistas

Solicitar cita
Nuestros usuarios han valorado este artículo con:
4.7 (94%) 839 votos

Aviso médico: Los contenidos publicados en Operarme.es tienen como objetivo la divulgación, a un público general, de información médica de confianza y están revisados por profesionales sanitarios. En ningún caso, debe ser utilizada para realizar un diagnóstico, indicar un tratamiento o sustituir la opinión médica de un profesional en consulta presencial. Más información en los enlaces a continuación:


Precio cerrado

5.490 €

Todo incluido

Financiación
desde 226 €/mes

Saber más

Solicitar Cita

Consulta de valoración quirúrgica gratuita y sin esperas

¿Qué opinan nuestros pacientes?

Nuestros pacientes han valorado este servicio con

Ver todas las opiniones

¿Por qué confiar en Operarme.es?

  • El precio final es el que aparece en la página web, sin sorpresas finales.

    Leer más

  • Consulta de valoración quirúrgica inmediata y gratuita. Tiempo medio para cirugías de 17 días.

    Leer más

  • En Operarme.es no pagas nada hasta que tú, junto a tu médico, decidas llevar a cabo la cirugía.

    Leer más

  • Como paciente, tienes un asesor personal que te ayuda y soluciona cualquier duda del proceso.

    Leer más

  • Habitación privada con cama de acompañante, la mejor atención y comodidad.

    Leer más

  • En cirugías con estancia hospitalaria te recogemos en casa el día del ingreso y te llevamos de vuelta el día de alta.

    Leer más